Revolución médica: el PRP revela su potencial en urología
La inyección de PRP desencadena los mecanismos naturales de reparación del cuerpo y mejora la nutrición de los tejidos. El material utilizado para el tratamiento es completamente autólogo, ya que el procedimiento se realiza mediante la inyección de plasma obtenido de la propia sangre del paciente.
Tratamiento Urológico con PRP: Un Enfoque Prometedor
El PRP se utiliza para tratar la cistitis crónica, la uretritis, las úlceras, la prostatitis (inflamación de la próstata) y las enfermedades inflamatorias crónicas del tracto urinario.
Se demuestra que es inofensivo, extendiendo significativamente la duración del período de remisión, acortando la duración de un tratamiento estándar y acelerando la regeneración de la membrana mucosa.
El procedimiento que utiliza plasma autólogo elimina el dolor constante, las sensaciones de hormigueo y quemazón, la necesidad constante de orinar y la incomodidad mental.
Después de un solo tratamiento con plasma rico en plaquetas, la calidad de vida del paciente mejora notablemente.
Los efectos positivos ya se pueden observar después de 1 a 2 intervenciones: se reduce la frecuencia de la micción, desaparece la hematuria (presencia de sangre en la orina), se reducen las úlceras mucosas y hay una clara tendencia a la cicatrización de las úlceras.
Por ejemplo, la eficacia del tratamiento de la cistitis y la uretritis en combinación con la terapia de PRP es claramente superior a los métodos tradicionales generalmente aceptados.
Sitios de inyección y procedimiento
Este tratamiento basado en PRP consiste en inyectar plasma rico en plaquetas en las paredes de la vejiga y la uretra para sanar las áreas afectadas por procesos inflamatorios.
Los factores de crecimiento contenidos en las plaquetas estimulan la regeneración de la mucosa y la reparación de las lesiones.
El procedimiento es eficaz incluso para enfermedades infecciosas crónicas y de larga duración de los órganos del sistema urinario.
Sitios de inyección y procedimiento
- Acelerar la regeneración de la mucosa vesical.
- Aliviar la disuria (dificultad al orinar).
- Normalizar la diuresis (producción y eliminación de la orina).
- Prolongar el período de remisión en pacientes con enfermedades crónicas.
- Profilaxis de enfermedades urológicas.
- Reducir la duración del tratamiento.
- Mejorar la eficacia de la terapia antimicrobiana.
- Mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Campos de aplicación :
Cistitis
Uretritis
Enfermedades inflamatorias de los órganos del sistema urinario
Disfunción eréctil
Enfermedad de Peyronie
Incontinencia urinaria de esfuerzo
El PRP se puede combinar con los siguientes procedimientos :
- Terapia médica
- Terapia física (terapia con láser, electroforesis, microenemas)
- Terapia de ozono
- Inmunocorrección
- Masaje
Indicaciones para el tratamiento de PRP en urología :
La duración del tratamiento la determina el médico tratante, en función de las quejas del paciente, su estado y el resultado deseado.
El día de la intervención, evite visitar baños y saunas.
El efecto del PRP en ciertas enfermedades
Tratamiento de la disfunción eréctil :
La disfunción eréctil implica dificultades crónicas para llevar a cabo un acto sexual completo.
Puede manifestarse como problemas de erección, ausencia de eyaculación u orgasmo, y otros fenómenos que impiden disfrutar de las relaciones sexuales.
Sin embargo, con mayor frecuencia, los pacientes buscan ayuda médica para quejarse de la primera variante del trastorno, en la que, durante la excitación sexual, el pene, por alguna razón, no se llena lo suficiente de sangre (permanece flácido, no aumenta de tamaño).
Solución:
La terapia PRP se revela como una solución y proporciona resultados relativamente rápidos.
Este procedimiento estimula los recursos regenerativos ocultos del cuerpo, la formación de nuevos vasos sanguíneos, músculos y tejidos nerviosos.
Como resultado de las sesiones de tratamiento, la vida sexual mejora, la duración de las relaciones sexuales aumenta, el síndrome de dolor disminuye y los síntomas de la disfunción eréctil se reducen.
Tratamiento del adenoma de próstata :
El adenoma de próstata afecta a muchos hombres después de los 40 años.
El adenoma es una degeneración de los tejidos. La enfermedad es autoinmune: las células inmunitarias del cuerpo "atacan" y destruyen sus propios tejidos, reemplazándolos por tejido conectivo.
El proceso implica la formación de nódulos en la próstata. A veces, se observa un aumento en el volumen total de la próstata.
El adenoma bloquea la uretra, dificultando la micción. Esto lleva a un deterioro de la función renal y de la vejiga.
Solución:
Estos problemas se pueden corregir con PRP. Involucra la introducción del propio plasma del paciente, enriquecido con proteínas, plaquetas y componentes antiinflamatorios, en la zona de la próstata.
Estos componentes, enriquecidos con factores antiinflamatorios, tienen un efecto curativo dentro de la próstata al segregar varios inmunomoduladores, promoviendo así la regeneración celular.
También se observa una reducción en el crecimiento fibroso: la próstata se vuelve más flexible y los nódulos adenomatosos se ablandan y disminuyen.
Tratamiento de la uretritis
La uretritis es un proceso inflamatorio que puede ocurrir en las paredes de la uretra.
Esta enfermedad se diagnostica con bastante frecuencia y puede encontrarse en cualquier persona, independientemente de su edad.
Las causas de su aparición son muy diversas, desde la falta de higiene personal hasta la invasión de la uretra por varios patógenos.
Los síntomas incluyen ardor al orinar, dolor en la región pélvica, urgencia constante de orinar, así como un importante malestar psicológico.
Solución:
La mayoría de los pacientes pueden retomar sus actividades diarias normales en poco tiempo después del tratamiento con PRP.
Se observa una mejora significativa después de varias sesiones de tratamiento.
El plasma rico en plaquetas puede reducir naturalmente el deseo de orinar y eliminar la hematuria (presencia de sangre en la orina).
Tratamiento de la incontinencia urinaria y fecal
La incontinencia urinaria es una condición caracterizada por la fuga de orina incontrolada.
Es una condición bastante común que suele afectar a hombres de mediana edad y ancianos.
En casos de incontinencia urinaria, la micción involuntaria se acompaña de una presión frecuente e intensa sobre la vejiga. El paciente no puede retener la orina, que a menudo se produce en un chorro repentino.
Las causas de estos síntomas pueden ser infecciones de la vejiga, cáncer de vejiga, enfermedades neurológicas, lesiones en la médula espinal, lesiones en la vejiga después de radioterapia pélvica o cuerpos extraños en la vejiga.
La causa más común de incontinencia en hombres, a pesar de las tecnologías quirúrgicas modernas, es el daño del esfínter (el dispositivo en forma de válvula que regula el paso de contenido de un órgano a otro) durante la cirugía radical para el cáncer de próstata.
Al igual que con la incontinencia urinaria, el paciente experimenta movimientos intestinales incontrolados.
Solución:
Se inyecta plasma rico en plaquetas obtenido a partir de la sangre del propio paciente directamente en el esfínter dañado y en los tejidos circundantes.
Los músculos debilitados se regeneran y se restauran las funciones reguladoras del esfínter.
El mismo efecto se logra al inyectar plasma rico en plaquetas en el esfínter anal dañado si el paciente sufre de incontinencia fecal.
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